El hallazgo inesperado de máscaras de terracota en el yacimiento fenicio refuerza la práctica de actividades de culto en la antigua isla de la desembocadura del Guadalhorce
Paco Griñán y Encarni Hinojosa
Málaga
Domingo, 21 de diciembre 2025, 00:22
colonia fenicia dejó de ser habitada se transformó en un 'polígono' industrial de la floreciente Malaka. En ello estaban –y están– los arqueólogos del equipo liderado por el profesor de la Universidad de Málaga José Suárez, cuando durante la última campaña de excavaciones el pasado septiembre se desenterraron en otro punto del yacimiento unos vestigios inesperados. Unos fragmentos de máscaras de terracota que dan nuevas pistas sobre los todavía desconocidos usos religiosos de aquella población.Las máscaras encontradas
en el Cerro del Villar
7 cm
Máscara grotesca que reproduce una boca con dientes prominentes
9 cm
Máscara que comprende nariz, parte
de la frente, un
ojo y una oreja
MÁLAGA
Carretera
de Cádiz
Guadalhorce
Cerro del Villar
Guadalmar
Aeropuerto
Puerto
Yacimiento
Gualdalhorce
Sector 14
Sector 11 y 12
Época
Época
Púnica, siglos
VI al V a. C.
En el extremo
más occidental
de la antigua
isla se encuentra
un horno de fabricación cerámica y un vertedero con
miles de fragmentos de piezas que
fueron
desechadas
Arcaica,
siglo VII a. C.
Zona del gran
edificio de
200 metros
cuadrados y
cercano al puerto
del Cerro del
Villar, donde
se encontraron
los fragmentos
de máscaras
grotescas
Máscaras fenicias halladas en
otras excavaciones del mundo
650 a. C.
550 a. C.
450 a. C.
350 a. C.
250 a. C.
10 cm
Fuente: Universidad de Málaga
E. HINOJOSA
Las máscaras encontradas
en el Cerro del Villar
7 cm
Máscara grotesca que reproduce
una boca con dientes prominentes
9 cm
Máscara que
comprende nariz,
parte de la frente,
un ojo y una oreja
MÁLAGA
Carretera
de Cádiz
Guadalhorce
Cerro del Villar
Guadalmar
Aeropuerto
Puerto
Yacimiento
Gualdalhorce
Sector 14
Sector 11 y 12
Época
Época
Púnica, siglos
VI al V a. C.
En el extremo
más occidental
de la antigua
isla se encuentra
un horno de fabricación cerámica y un vertedero con
miles de fragmentos de piezas que
fueron
desechadas
Arcaica,
siglo VII a. C.
Zona del gran
edificio de
200 metros
cuadrados y
cercano al puerto
del Cerro del
Villar, donde
se encontraron
los fragmentos
de máscaras
grotescas
Máscaras fenicias halladas en
otras excavaciones del mundo
650 a. C.
550 a. C.
450 a. C.
350 a. C.
250 a. C.
10 cm
Fuente: Universidad de Málaga
E. HINOJOSA
Las máscaras encontradas en el Cerro del Villar
9 cm
7 cm
Máscara que
comprende nariz,
parte de la frente,
un ojo y una oreja
Máscara grotesca
que reproduce una boca
con dientes prominentes
MÁLAGA
Carretera
de Cádiz
Guadalhorce
Cerro del Villar
Guadalmar
Aeropuerto
Sector 11 y 12
Época
Arcaica, siglo VII a. C.
Zona del gran edificio de 200 metros cuadrados y cercano al puerto del
Cerro del Villar, donde se encontraron
los fragmentos de máscaras grotescas
Guadalmar
Yacimiento
Puerto
Sector 14
Época
Púnica, siglos VI al V a. C.
En el extremo más occidental de la antigua isla se encuentra un horno de fabricación cerámica y un vertedero con miles de fragmentos de piezas que fueron desechadas
Gualdalhorce
Máscaras fenicias halladas en otras excavaciones del mundo
650 a. C.
550 a. C.
450 a. C.
350 a. C.
250 a. C.
10 cm
Fuente: Universidad de Málaga
E. HINOJOSA
Las máscaras encontradas en el Cerro del Villar
9 cm
7 cm
Máscara grotesca
que reproduce una boca
con dientes prominentes
Máscara que comprende nariz,
parte de la frente,
un ojo y una oreja
MÁLAGA
Carretera
de Cádiz
Guadalhorce
Cerro del Villar
Guadalmar
Aeropuerto
Sector 11 y 12
Época
Arcaica, siglo VII a. C.
Zona del gran edificio de 200 metros cuadrados y cercano al puerto del
Cerro del Villar, donde se encontraron
los fragmentos de máscaras grotescas
Guadalmar
Yacimiento
Puerto
Sector 14
Época
Púnica, siglos VI al V a. C.
En el extremo más occidental de la antigua isla se encuentra un horno de fabricación cerámica y un vertedero con miles de fragmentos de piezas que fueron desechadas
Gualdalhorce
Máscaras fenicias halladas en otras excavaciones del mundo
650 a. C.
550 a. C.
450 a. C.
350 a. C.
250 a. C.
10 cm
Fuente: Universidad de Málaga
E. HINOJOSA
Según explica el experto, este tipo de objetos eran característicos de Oriente y Cartago (Mediterráneo central), donde se suelen vincular a ambientes funerarios y necrópolis. No es el caso de Málaga, ya que estos fragmentos se encontraron en el sector 11 y 12 de la excavaciones, que es la zona donde también apareció el suelo de conchas al que se le otorga un sentido protector y un ámbito cercano al puerto o embarcadero del Cerro del Villar. «Deben de tener algún tipo de componente ritual, pero el hecho de que hayan aparecido en un edificio que estaba prácticamente pegado a la antigua costa, con mucha actividad comercial, puede ser que fueran productos que estaban circulando y que alguien los trajera o los iba a vender», avanza Sáez.
Las ánforas de
Málaga a Olimpia
Las ánforas desenterradas
en el Cerro del Villar tienen
una forma y composición de arcillas que permiten
identificar su origen.
Aquí se pueden ver
fragmentos de una de ellas,
con su característica asa.
Estos recipientes se
distribuyeron por
el Mediterráneo
Esta ánfora encontrada en el santuario de Olimpia (Grecia)
es la misma que las
encontradas esta campaña
en el vertedero de cerámica
del Cerro del Villar, lo que
ilustra la floreciente
exportación de salazones
desde la isla malagueña
Las ánforas de Málaga a Olimpia
Las ánforas desenterradas en el Cerro del
Villar tienen una forma y composición de
arcillas que permiten identificar su origen.
Aquí se pueden ver fragmentos de una de
ellas, con su característica asa.
Estos recipientes se distribuyeron
por el Mediterráneo
Esta ánfora encontrada en el santuario de
Olimpia (Grecia) es la misma que las
encontradas esta campaña en el vertedero
de cerámica del Cerro del Villar, lo que
ilustra la floreciente exportación de
salazones desde la isla malagueña
Las ánforas de Málaga a Olimpia
Las ánforas desenterradas
en el Cerro del Villar tienen
una forma y composición
de arcillas que permiten identificarsu origen.
Aquí se pueden ver
fragmentos de una de ellas,
con su característica asa.
Estos recipientes se
distribuyeron por el Mediterráneo
Esta ánfora encontrada en el
santuario de Olimpia (Grecia)
es la misma que las
encontradas esta campaña
en el vertedero de cerámica
del Cerro del Villar, lo que
ilustra la floreciente exportación
de salazones desde
la isla malagueña
Las ánforas de Málaga a Olimpia
Las ánforas desenterradas
en el Cerro del Villar tienen
una forma y composición
de arcillas que permiten identificarsu origen.
Aquí se pueden ver
fragmentos de una de ellas,
con su característica asa.
Estos recipientes se
distribuyeron por el Mediterráneo
Esta ánfora encontrada en el
santuario de Olimpia (Grecia)
es la misma que las
encontradas esta campaña
en el vertedero de cerámica
del Cerro del Villar, lo que
ilustra la floreciente exportación
de salazones desde
la isla malagueña
El hallazgo de estos objetos faciales que reproducen algún tipo de animal o ser mitológico también entronca con uno de los grandes enigmas por descubrir en el antiguo poblado fenicio de Cerro del Villar, donde no se ha encontrado todavía el santuario de este asentamiento, sino pequeños altares en espacios residenciales y objetos de ofrenda, como un fragmento de ancla y figuras. «Estas máscaras siempre están relacionadas con prácticas de culto y religiosas, por lo que, habiendo ya identificado el pavimento de conchas, no sería raro que tuvieran que ver con ceremonias que se estuvieran realizando en este entorno», añade el director de las excavaciones del Cerro del Villar, José Suárez, que lidera desde la Universidad de Málaga el actual programa de investigación financiado por la Junta de Andalucía, con la colaboración de otras universidades andaluzas, como Cádiz, Córdoba y Sevilla, e internacionales, caso de Chicago (EE UU) y Marburgo (Alemania), además del apoyo de especialistas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de los Servicios Centrales de Apoyo a la Investigación (SCAI).
Fachada marítima del Cerro del Villar
Las máscaras grotescas han aparecido en un sector que también ha revelado novedades este año desde el punto urbanístico, ya que se ha podido excavar con más profusión el gran edificio de 200 metros cuadrados localizado en la campaña anterior y cercano a la zona portuaria, por lo que los arqueólogos ya tienen una idea cercana de la fachada marítima de la entonces isla y lo que los marineros y comerciantes veían cuando llegaban en barco. «Hemos comprobado como en el siglo VII a.C., el Cerro del Villar tuvo una entidad urbanística y económica que no nos imaginábamos hasta ahora», asegura el director de las excavaciones, que añade que en este sector se han encontrado pruebas del gran comercio e intercambio de productos con otras zonas del Mediterráneo, como Grecia, Corinto y Etruria que evidencia un «momento de pujanza y riqueza».
«En el siglo VII a.C., el Cerro del Villar tuvo una entidad urbanística y económica que no nos imaginábamos hasta ahora»
José Suárez
Director de las excavaciones en el Cerro del Villar
Unas rutas que también funcionaban a la inversa ya que piezas fabricadas en el Cerro del Villar se han encontrado en excavaciones de un santuario en Olimpia. No obstante, cada puerta que se abre en el yacimiento también conduce a nuevas cerraduras por descifrar. «Todavía no sabemos cuál fue el uso exacto de este gran edificio», manifiesta José Suárez, que añade que en el inmueble se ha identificado tanto la actividad residencial, como la de almacenamiento y la metalúrgica con fabricación de objetos de cobre. Estamos, por tanto, ante un espacio «multiusos», aunque los análisis también siguen en marcha para descifrar su papel en aquella esplendorosa sociedad fenicia del siglo VII a.C., señala sobre las excavaciones financiadas por la Consejería de Cultura y Deportes, con la colaboración del Ayuntamiento de la capital, Fundación Málaga y Diputación.
«Se conocía mal»
De forma paralela, al otro extremo de la isla, en el sector 14, también se están produciendo avances sobre una época fenicia posterior, la púnica, en la que la isla se queda desierta por las inundaciones y los fenómenos naturales, trasladándose la población a la actual Málaga, pero quedando el Cerro del Villar como zona industrial, artesanal y subsidiaria de la vecina población que se impone en la bahía. «Es una fase del yacimiento que se conocía, pero se conocía mal, porque la información se basaba en el material de superficie y alguna estructura, pero el enorme vertedero de miles de fragmentos de cerámica no sólo nos informa de la producción de ánforas para el comercio de salazones de pesca, sino que nos va a permitir estudiar por primera vez la evolución de esos envases desde mediados del siglo VI a.C. hasta por lo menos la primera mitad del siglo V a.C. para establecer tecnologías y contactos comerciales», explica el arqueólogo Antonio Sáez.
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Esa montaña de desechos cerámicos que se formó a lo largo de un siglo de la época púnica ya ha constatado una «actividad artesanal muy intensa», por lo que estamos ante un nuevo «florecimiento económico» de la isla gracias a ese mismo comercio marítimo que ya marcó la expansión de la etapa arcaica. ¿Y por qué se detuvo en el V a.C. esta próspera factoría cerámica de envases para el almacenamiento de alimentos? Y aquí la respuesta está en la mirada conjunta de lo que ocurría en Málaga y el resto del Mediterráneo.
«Las máscaras son elementos excepcionales ya que han aparecido muy poquitas de este tipo en Occidente»
Antonio Sáez
Arqueólogo
«Es un proceso que observamos en general en toda la región, también en Cádiz y en otros lugares, donde la industria de los salazones parece que vive una gran crisis, dejan de exportar a Grecia y otros lugares lejanos, probablemente por problemas con Cartago que es una potencia cada vez más importante, y los productores se refugian en los mercados regionales más cercanos», afirma el arqueólogo Antonio Sáez sobre los hallazgos que siguen quitándole la máscara al Cerro del Villar. Así, desde el inicio del actual proyecto de excavaciones hace cuatro años a cargo de la UMA, las investigaciones han permitido poner a la antigua colonia en el centro del debate para conocer el encuentro del mundo fenicio con las poblaciones autóctonas de la Península hace 3.000 años.
Créditos
Información y texto: Paco Griñán
Diseño e infografías: Encarni Hinojosa
Fotografías: Universidad de Málaga
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