El presidente francés, Emmanuel Macron, conversa con Pedro Sánchez durante la cumbre de octubre Unión Europea
Europa El pacto comercial entre la UE y Mercosur que impulsa Sánchez, al borde del colapso por las maniobras dilatorias de FranciaItalia tiene en sus manos la suerte del acuerdo: hasta ahora se ha movido en la ambigüedad, pero si se decanta por el "no" podrá tumbarlo definitivamente.
Más información: Bruselas blinda el pacto comercial con Mercosur para vencer el 'no' de Francia y lograr su ratificación este año
Juan Sanhermelando Bruselas Publicada 16 diciembre 2025 02:10hLas claves nuevo Generado con IA
El acuerdo comercial entre la UE y Mercosur, impulsado por España y Alemania, está en riesgo de colapso debido a las maniobras dilatorias de Francia.
Francia exige aplazar la firma del pacto hasta 2026, argumentando la necesidad de mayores garantías para su sector agrícola y busca apoyo de otros países para bloquear el acuerdo.
La Comisión Europea subraya la importancia estratégica y económica del pacto, que crearía un mercado de 700 millones de personas y ahorraría 4.000 millones de euros al año en aranceles.
Italia tiene el voto decisivo para el futuro del acuerdo, mientras que países como Polonia y Hungría se oponen, y Austria y Bélgica se abstienen.
"Si no firmamos con Mercosur en los próximos días, estará muerto". Así de rotundo se muestra un alto diplomático de la UE en declaraciones a EL ESPAÑOL sobre el destino del mayor acuerdo comercial que ha negociado hasta ahora Bruselas (crearía un mercado de 700 millones de habitantes), en un largo y tortuoso proceso que ha costado 25 años.
Cuando apenas quedan metros para cruzar la línea de meta, el pacto de la UE con el bloque formado por Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay —cuyos principales impulsores son el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el canciller alemán, Friedrich Merz— está al borde del colapso total debido a las maniobras dilatorias de París.
Mientras la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, se prepara para volar a Brasilia y firmar el acuerdo el próximo sábado 20 de diciembre, el primer ministro francés, Sébastien Lecornu, ha activado una ofensiva de última hora para dinamitarlo: su última excusa es que necesita más tiempo, por lo que pide aplazar la rúbrica hasta 2026.
Coches por carne: Bruselas y Mercosur cierran un polémico acuerdo de libre comercio tras 25 años de negociación"Está claro que no se dan las condiciones para que el Consejo de la UE vote sobre la autorización de firma del acuerdo. Francia pide que se posponga la fecha límite de diciembre para poder continuar el trabajo y obtener las medidas de protección legítimas para nuestra agricultura europea", reclama Lecornu en un comunicado.
En el bando contrario, España y Alemania presionan para que el pacto con Mercosur se firme antes de fin de año. Lo consideran una prioridad estratégica, ya que permitirá a la UE abrir nuevos mercados para compensar la subida de aranceles decretada por Trump y, al mismo tiempo, reducir la dependencia de China en productos clave como las tierras raras.
"Mercosur es muy importante para nosotros. La presidencia danesa está teniendo una posición muy firme y nosotros estamos respaldando ese ímpetu para que pueda salir adelante", explican fuentes gubernamentales.
En Moncloa apuntan además que los países del bloque latinoamericano les han trasladado su impaciencia por llevar el acuerdo a buen puerto. La UE cree que el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva es el único que tiene autoridad suficiente en Mercosur para sacar adelante el acuerdo, una oportunidad que pasará cuando deje la presidencia del bloque a finales de año.
La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, junto con los presidentes de Uruguay, Luis Lacalle; Argentina, Javier Milei; Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; y Paraguay, Santiago Pena, cuando se anunció el acuerdo en diciembre de 2024 Reuters
"En un momento en que Estados Unidos se cierra, la UE debe actuar como un bastión del comercio y la cooperación. Esto será cada vez más importante de cara al futuro", señala otro diplomático europeo indignado con el intento de boicot de Francia.
En realidad, París está intentando reunir una minoría de bloqueo para tumbar el acuerdo con Mercosur. Polonia y Hungría ya han anunciado que votarán también en contra, mientras que Austria y Bélgica se abstienen. Pero con estos países no es suficiente para frenar el pacto.
El voto decisivo lo tiene Italia, que hasta ahora se ha movido en la ambigüedad. La primera ministra Giorgia Meloni se guarda sus cartas, pero si al final se decanta por el 'no' causará el naufragio definitivo del pacto con Mercosur. De ahí que la consigna en Bruselas es avanzar con la máxima cautela.
Francia —que siempre ha rechazado el pacto con Mercosur por considerarlo una amenaza a su sector ganadero— admite que el Ejecutivo comunitario ha respondido en los últimos meses a algunas de sus preocupaciones. Primero, con una cláusula de salvaguardia agrícola, que será aprobada este mismo martes por la Eurocámara.
En segundo lugar, Bruselas ha anunciado un refuerzo de los controles fitosanitarios en frontera y en países terceros a partir de 2026 para garantizar la seguridad alimentaria. Finalmente, Von der Leyen ha prometido introducir 'cláusulas espejo' con el objetivo de asegurar la igualdad en las condiciones de producción.
"Sin embargo, estos avances siguen siendo incompletos y deben concretarse y aplicarse de manera operativa, sólida y efectiva para poder ver y valorar sus efectos completos", alega el primer ministro francés en una declaración difundida a última hora del domingo.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, tiene el destino del acuerdo con Mercosur en sus manos Unión Europea
El equipo de Von der Leyen también ha respondido con contundencia al enésimo intento de boicot francés. "En opinión de la Comisión, firmar el acuerdo ahora es de importancia crucial, tanto desde el punto de vista económico, como diplomático o geopolítico", ha subrayado su portavoz de Comercio, Olof Gill.
"La Comisión ha escuchado atentamente a los agricultores europeos, a los consumidores, a los Estados miembros y a los eurodiputados, y ha actuado de manera decidida respondiendo a todas las preocupaciones y solicitudes con medidas complementarias efectivas", insiste el portavoz.
Macron despliega todas sus tropas para intentar tumbar el acuerdo comercial con Mercosur que persigue SánchezEl Ejecutivo comunitario alega que el acuerdo con Mercosur —que se basa en el canje de carne de vacuno y productos agrícolas latinoamericanos por coches y maquinaria de la Unión Europea— ahorrará a los exportadores europeos 4.000 millones de euros al año en aranceles.
"Pero la importancia del pacto va mucho más allá de los beneficios económicos. Es relevante para el mundo y para la economía global, porque enviaría una señal clara de que los acuerdos basados en normas siguen ofreciendo un enorme valor y un refugio seguro para avanzar en tiempos tan complicados", ha zanjado Gill.
De la coreografía de los próximos días dependerá en buena medida si el pacto con Mercosur llega a buen puerto o naufraga. Tras la votación de este martes en Estrasburgo, la presidencia danesa de la UE tiene previsto cerrar un acuerdo con la Eurocámara el miércoles y someter después el acuerdo a votación de los gobiernos.
El escenario central que maneja Bruselas es que esta cuestión acabe en la agenda de la cumbre de líderes europeos que se celebra el 18 de julio. "Es una estrategia inteligente porque así Italia no podrá seguir escondiéndose detrás de Francia", apuntan las fuentes consultadas.