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Trump y Epstein en una fiesta. Reuters Los demócratas agitan el 'caso Epstein' y publican nuevas fotos de sus fiestas con TrumpLa última tanda de imágenes de la investigación colocan al pederasta junto a personalidades como Bill Clinton o Woody Allen
Corresponsal. Nueva York
Viernes, 12 de diciembre 2025, 21:50 | Actualizado 22:19h.
... dijo una vez Donald Trump a la revista New York, salieron ayer a la luz tras la publicación autorizada por el Comité de Supervisión de la Cámara Baja. El presidente es otro de los magnates que aparece en ellas, sin más explicación.Las imágenes inéditas de la «isla de los pedófilos» de Epstein
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Entre las instantáneas también aparecen retratados juguetes sexuales, tales como un guante negro con protuberancias varias, en las que cada dedo parece inspirar un placer sexual diferente. Lo viste un brazo de piel clara y tersa, que posa para la foto con buena iluminación, sobre los cojines de volantes en tono pastel que parecen estar sobre una cama.
Esta y otras dieciocho fotos se encontraron en los 95.000 correos electrónicos que existían en el ordenador del financiero condenado en Florida por prostituir a menores. Epstein solo tuvo que dormir 13 meses en prisión, gracias a un trato privilegiado que le permitía salir «a trabajar» diariamente. Alex Acosta, el fiscal que pactó con él esas condiciones, fue nombrado en 2017 secretario de Trabajo por Trump, quien fue gran amigo del financiero y frecuentó con él numerosas fiestas de ambiente nocturno, como la de Victoria's Secret que aparece en una de las fotos publicadas este viernes, rodeados de jóvenes modelos de ropa interior en temática hawaiana.
Algunas de las imágenes difundidas sobre el caso. ReutersTrump y Acosta ascendieron al poder político de Washington, pero Epstein volvió a la cárcel, donde presuntamente se suicidó en 2019. Se le acusaba de tráfico sexual de menores, decenas de ellas, según habían descubierto hasta ese momento las autoridades, aunque los abogados de las víctimas han identificado a más de un centenar. La socia sentimental de Epstein, Ghislaine Maxwell, captaba amigablemente a adolescentes en apuros, les procuraba favores económicos a cambio de masajes a su jefe, y este las acababa prostituyendo con hombres influyentes a los que quería tener acceso.
Protagonistas ilustres
Algunos aparecen en las fotos, y no es solo Woody Allen, el cineasta acusado por su pareja, Mia Farrow, de abusar sexualmente de la hija adoptada de ambos, que libró esos cargos pero se casó después con su otra hija adoptiva, la vietnamita Soon-Yi Previn, cuando esta cumplió los 21 años.
Acompañan al financiero en esas imágenes congeladas en el tiempo otros hombres fatalmente atraídos por mujeres jóvenes como Bill Clinton y su secretario del Tesoro Larry Summers, pero también otros que no habían salido antes a la luz, como el fundador de Virgin, Richard Branson, que aparece presuntamente como su invitado en la isla del Caribe que poseía, y Steve Bannon, arquitecto electoral de la primera victoria de Trump y destacado pilar ideológico de su movimiento.
La eterna sonrisa de Epstein incomoda cada día más a los hombres que le acompañaron a lo largo de su vida, especialmente al presidente Trump, que había prometido a sus seguidores hacer públicos todos y cada uno de los archivos que, presuntamente, debían desenmascarar a todos los demócratas prominentes que las teorías conspiratorias de QAnon han acusado de pederastia y hasta canibalismo. Carnaza electoral, hasta que su fiscal general, Pam Bondi, le comunicó en mayo pasado que su nombre aparecía una y otra vez a lo largo de la investigación.
Desde entonces su gobierno encontró una excusa detrás de otra para evitar cumplir esa promesa, pero los demócratas no soltaron la presa de algo que, evidentemente, irritaba al presidente cada vez que se le preguntaba por ello. Y a medida que su resistencia perjudicó la confianza de sus bases, el caso Epstein es dinamita electoral en estado latente. De ahí que el Comité de Supervisión del Congreso prefiera hacerla explotar en pequeñas dosis que, hasta ahora, no aportan más evidencias de lo que ya se sabía. Epstein tenía una disfunción eréctil, según contó su socia en el juicio, que le hizo buscar juegos sexuales cada vez más atrevidos y menores cada vez más jóvenes, que compartía con sus amigos privilegiados de todo el mundo.
En la casa de Manhattan
Según los correos electrónicos recabados de su cuenta, Trump era consciente de ello, pero no participó de esos juegos. Pasó, eso sí, «horas» a solas con una de las «masajistas» de Epstein en su casa de Manhattan donde ocurrieron muchas de las escenas que iban a ser juzgadas. No hay, todavía, ningún historial de vuelo que le sitúe en la isla privada de las Islas Vírgenes a las que el financiero llevaba a sus amigos. Entre ellos, el príncipe Andrés de Inglaterra, que pactó un acuerdo económico con una de las chicas cuando se hicieron públicas fotos de ambos cogidos de la mano en esas playas. Virginia Giuffre no tuvo mucho tiempo para disfrutar de la suma acordada en 2022. Falleció este año en Australia, en un presunto suicidio cuestionado por su familia.
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