Domingo, 21 de diciembre 2025, 01:00
... propios de una cartera conservadora. La volatilidad global de los mercados exige llevar el mantra de la diversificación financiera un paso más allá. El sector inmobiliario sigue siendo fuente de deseo. Pero incluso aquí la creatividad se ha llevado más lejos: además de las inversiones clásicas en inmuebles residenciales, la demanda se abre a nuevos horizontes, como los centros de datos o las residencias de estudiantes. La inversión en estos últimos se incrementará un 151% en 2025, alcanzando los 1.700 millones de euros. Se trata de inmuebles desmejorados en los cuales los inversores ven la oportunidad de practicar un lavado de cara y obtener amplios beneficios. El oro también ha sido objeto de revalorización: en octubre superó los 4.000 euros por onza por primera vez en la historia. Se trata, en definitiva, de hacer de la necesidad virtud: ante la crisis global provocada en 2025 por las guerras, las crisis o la errática guerra arancelaria desatada por Trump, la exploración de nuevos territorios de inversión se convierte en un preciado refugio en el que buscar la estabilidad perdida.Límite de sesiones alcanzadas
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