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La presencia de italianos en nuestro país es habitual desde tiempos inmemoriales. AFP ¿Por qué a los italianos les gusta tanto España?Entre los destinos favoritos ·
La emigración de ciudadanos transalpinos a nuestro país se multiplica por diez en el último cuarto de siglo atraídos por la cercanía cultural, el crecimiento económico y la apertura socialRoma
Sábado, 20 de diciembre 2025, 12:44
... a los que se marchan a otros Estados, con España entre los destinos favoritos para comenzar una nueva vida ante las dificultades económicas, laborales, sociales, fiscales y burocráticas que los italianos encuentran en su tierra. En los últimos años, nuestro país se ha destapado como un lugar cada vez más atractivo. Las estadísticas más recientes señalan que 255.858 ciudadanos transalpinos se han mudado a España, aunque algunas estimaciones elevan el número por encima de los 325.000. El crecimiento de las cifras ha sido exponencial en los últimos ejercicios, porque en el año 2000 eran apenas 24.000; es decir, se han multiplicado por más diez en el último cuarto de siglo. Ampliar Jucky Campolongo. R. C.La presencia de italianos en nuestro país es habitual desde tiempos inmemoriales, pero ha sido durante las últimas décadas cuando se ha acelerado el fenómeno. «El estudio 'Italianos en el Mundo' muestra un crecimiento verdaderamente poderoso de España y un protagonismo fundamental como destino», señala Licata.
255.858 italianos
se han mudado a España. La cifra se ha multiplicado por diez en el último cuarto de siglo.
El caso de Jucky Campolongo es paradigmático. Llegó en 2002 a Murcia como estudiante del programa Erasmus sin hablar ni una palabra de español, pero no tardó en enamorarse de «la calidad de vida y del clima». Tras un año en la Península regresó a Toscana, su región de origen, pero cuando acabó la universidad en 2005 decidió volver a la capital del Segura. «En aquel momento me pareció que España ofrecía más oportunidades que Italia», cuenta.
Aunque los comienzos no fueron fáciles, encontró trabajo en una multinacional italiana que tiene sede en la región murciana. «Yo no la conocía antes y así lo dije en la entrevista, pero me cogieron y ya llevo ahí 19 años. He recorrido casi toda España y también viajo mucho por trabajo por Europa, pero siempre es un placer volver aquí», dice Campolongo, que no se plantea regresar a su país. «Aquí podemos disfrutar de la vida en la calle, de una calidad de vida que valoro mucho y de un clima fantástico durante diez meses al año». Eso sí, se le hacen muy cuesta arriba los dos meses más duros del «infernal» verano murciano y lo tarde que se suele cenar en España. «Sigue pareciéndome una locura», admite.
Son legión los italianos que, como Campolongo, abandonan su tierra para buscarse la vida lejos de casa. Según el último informe del Consejo Nacional de la Economía y el Trabajo (Cnel, por sus siglas en italiano) sobre la capacidad de atracción del país, entre 2011 y 2024 emigraron 630.0000 jóvenes al extranjero, lo que supone una enorme pérdida en términos sociales, económicos y, por supuesto, también demográficos.
Ampliar Elisa Purchiaroni García vive en Málaga. R. C.Despoblación
Con ese panorama, y el elevado envejecimiento, no es de extrañar que la población de Italia lleve una década cayendo y que las previsiones de los expertos señalen que el país contará en 2050 con 54,7 millones de habitantes, frente a los 58,9 que registraba a finales de 2024. Son cuatro millones menos, lo que puede tener unas consecuencias económicas catastróficas, entre ellas la caída del 9% en el PIB a mitad de siglo, como señalan los últimos estudios del Banco de Italia. La despoblación va de la mano del empobrecimiento o de crecimientos económicos raquíticos: entre 2004 y 2024 el PIB de los países de la Unión Europea subió de media un 29%, justo la cifra registrada en España, mientras que aumentó sólo un 5% en Italia.
43% del PIB
roza la presión fiscal en Italia. Es seis puntos más alta que la española.
Hay otro dato económico que ayuda a entender por qué son tantos los transalpinos que dejan su tierra para buscar una oportunidad en España, el país que dos de cada tres italianos consideran el más similar al suyo, según una encuesta de Yougov. Se trata de la presión fiscal, que roza el 43% del PIB, seis puntos más alta que la española. En Italia, en definitiva, existen impuestos a un nivel similar al de las naciones del norte de Europa, pero ni de lejos se cuenta con sus ayudas y servicios sociales. Esta realidad de pagar mucho, ver poco retorno en tu relación con el Estado, echar muchas horas para lidiar con la burocracia y el alto coste de la vida explican que un gran número de italianos decidan buscarse la vida fuera de su país, pese a lo mucho que quieren a su tierra. La puntilla la da el altísimo nivel de deuda pública (137%, uno de los más elevados de Europa), que propicia que el Estado gaste más en cubrir los intereses de dicha deuda que en costear inversiones.
La gran cantidad de fondos utilizados en España durante las últimas décadas para modernizar las infraestructuras es precisamente uno de los aspectos que más valoran los italianos que emigran a nuestro país, al considerar que supone una mejora en las condiciones generales de vida. «Según mi experiencia España es un país moderno y progresista, con menos burocracia que Italia. Las infraestructuras, sobre todo las carreteras y las autopistas, están mejor conservadas, y se nota una forma de conducir más respetuosa con los peatones», asegura Paolo Rossi, un romano que vive en Galicia desde hace 7 años. Casado con una española, con quien tiene un hijo pequeño, emigró por motivos laborales y, por el momento, no tiene pensado volver a Italia.
«Aquí me siento libre de ser como soy»
«Aquí me siento en equilibrio porque soy libre de ser como soy. No percibo muchas imposiciones sociales. A menudo en Italia, si tienes 35 años, lo que se espera de una mujer es que tenga hijos y una familia, que lleve una vida estable. Pero yo he decidido llevar una vida algo diversa y no he sentido culpa por ello». El testimonio de Simona Curci, que lleva viviendo en Sevilla desde 2011, está recogido en el documental 'Sotto nuovi cieli: storie di donne italiane in Spagna' (Bajo nuevos cielos: historias de mujeres italianas en España), dirigido por Pietro Davide Jona-Lasinio e impulsado por Emanuela Cozzoni y Gabriella Lanzilli, consejeras del Comité de Italianos en el Extranjero de Madrid. Esta producción recientemente presentada en la Real Academia de España en Roma da voz a algunas de las miles de mujeres italianas de distintas edades y perfiles que han elegido España como el país donde vivir, enriqueciendo sus identidades y las de la nación que las acoge, como le ocurre a la veinteañera romana Chiara Busotti, que llegó a nuestro país cuando tenía 13 años: «Me di cuenta de que Madrid era mi casa cuando volvía a Roma. Me siento parte de esta realidad».
Un imán para los jubilados
Tampoco parece tener intención de regresar la italo-española Elisa Purchiaroni García, nacida en Roma hace 21 años y que hizo sus estudios primarios y secundarios en Italia hasta que en 2023 decidió mudarse a Salamanca para ir a la universidad. «Es una decisión que volvería a tomar sin pensármelo dos veces. Me siento mucho más acogida en Salamanca, tanto por la gente como por la ciudad. Seguramente me quedaré aquí en un futuro».
Ampliar Paolo Rossi, de excursión en las islas Cíes. R. C.Además de las cuestiones económicas, también pesa el hecho de que la sanidad sea pública y funcione relativamente bien, junto al buen clima que hace en gran parte del sur de España, en Baleares y Canarias, regiones que atraen a muchos jubilados. De hecho, son frecuentes los casos de personas mayores que pasan algunos períodos en territorio español para acompañar a sus hijos o a sus nietos, que han emigrado antes, y al final acaban trasladándose también ellos al descubrir que la vida puede resultar más fácil, barata e incluso divertida en España. En las entrevistas que realiza para elaborar su informe, Licata también ha descubierto que un motivo que atrae a muchas personas es el feminismo y el hecho de ser un país que respete la diversidad sexual. «España es atractiva porque se considera un país más libre en el pensamiento y en la cultura. Esto nos lo cuentan muchas mujeres que han partido solas. Otro nicho a considerar es la comunidad LGBTI. Es una nación que acoge en la libertad y en la posibilidad de vida también a quien se ha sentido en dificultad en otros lugares».
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