El presidente ruso, Vladímir Putin, asiste a su conferencia de prensa anual de fin de año, en Moscú. Gavriil Grigorov Sputnik
Europa Putin amenaza a Europa con otra guerra "si no hay respeto" y Trump pide a Ucrania "moverse rápido" en el proceso de pazNo habrá guerra con Europa salvo que haya guerra con Europa. Ese puede ser el resumen de la extensa charla que Putin dio ante un público adepto en su tradicional balance de fin de año. Mientras, Trump sigue presionando a Zelenski y Macron sorprende a todos.
Más información: Putin celebra el fracaso de la UE con los fondos rusos y denuncia el "atraco": "Las consecuencias serán graves para los ladrones"
Guillermo Ortiz Publicada 20 diciembre 2025 02:55h Actualizada 20 diciembre 2025 02:55hLas claves nuevo Generado con IA
Vladímir Putin ha advertido a Europa y la OTAN sobre un posible conflicto armado si Rusia no es tratada "con respeto" y amenaza con una guerra si se aísla Kaliningrado.
La tensión aumenta en los países bálticos, especialmente tras la incursión de soldados rusos en Estonia y las presiones sobre Finlandia y territorios cercanos a la República de Carelia.
El presidente francés Emmanuel Macron propone que Europa retome el diálogo directo con Putin, para no quedar al margen de las negociaciones sobre la guerra en Ucrania.
Donald Trump insta a Ucrania a avanzar rápidamente en el proceso de paz, mientras Putin sostiene que la resolución del conflicto requiere el cumplimiento total de las exigencias rusas.
Vladímir Putin dedicó buena parte de las cuatro horas y media de su discurso de balance del año a tachar de locos a todos los que alimentan el miedo a Rusia e insisten en que la idea del Kremlin es atacar a Europa y a la OTAN en un plazo no mayor de cinco años.
El resto del tiempo se lo pasó amenazando a la misma Europa y a la misma OTAN con una guerra abierta si no se trataba a Rusia "con respeto" y si se cometía la torpeza geopolítica de aislar Kaliningrado, enclave ruso situado entre Lituania y Polonia.
Rusia acusa a la OTAN de “intensiva militarización” en el Báltico y alerta de amenazas sobre Kaliningrado"Si se formulan amenazas de este tipo contra nosotros, las destruiremos. Acciones de este tipo conducirán simplemente a una escalada sin precedentes del conflicto, lo llevarán a un nivel completamente distinto y lo ampliarán hasta un conflicto armado a gran escala", declaró.
En otras palabras, que sí, que Rusia está preparada para una guerra con Europa y ni siquiera esto es nuevo, pues el propio Putin lo afirmó ya el mes pasado para quien quisiera escucharle.
Desde luego, la propia escalada verbal ya es de por sí preocupante. En las últimas semanas, hemos pasado de las hipótesis más o menos lejanas a las declaraciones de Mark Rutte afirmando que teníamos que estar preparados para "una gran guerra, como la que lucharon nuestros abuelos y nuestros bisabuelos" y los últimos dos avisos de Putin ya mencionados.
Miedo en los países bálticos
Quienes más sienten esta escalada son los países bálticos. Hace tiempo que sus gobiernos actúan como si la invasión rusa fuera inevitable y saben que ellos serán los primeros con los que Putin probará el verdadero compromiso con el famoso Artículo 5 de la OTAN de apoyo mutuo en caso de ataque.
Como dijo este jueves el exconsejero de Seguridad Nacional, John Bolton, en referencia a las promesas a Ucrania, "si Trump no cree en el Artículo 5 de la OTAN, ¿cómo va a creer en unas garantías similares a las del Artículo 5?".
Obviamente, los europeos no van a bloquear Kaliningrado. Otra cosa sería un ataque de falsa bandera que justificara una acción armada, pero Putin no sabe ni cómo le va en la acción armada que ya emprendió hace cuatro años, como para ponerse a iniciar otra.
En su discurso volvió a referirse a Kupiansk, esta vez para decir que está a punto de caer. Hace justo un mes, aseguró que ya había caído. ¿Es posible que un ejército que no consigue romper el cerco de una ciudad derruida en el este de Járkov se atreva a desafiar a todo Occidente? Habría que verlo.
El pasado 12 de diciembre, el ministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, exigió que Finlandia saliera de la OTAN, organización en la que no entró hasta 2023, cuando vio las barbas de su vecino pelar.
En las últimas fechas, se han reavivado los discursos imperialistas en torno a determinados territorios cercanos a la República de Carelia, región que los finlandeses tuvieron que ceder a la Unión Soviética al final de la Segunda Guerra Mundial.
Asimismo, la presión sigue creciendo sobre Estonia, donde el Gobierno denunció la incursión ilegal de tres soldados rusos, en lo que solo puede entenderse como un nuevo acto de provocación.
Los soldados pasearon cerca del río Narva durante unos veinte minutos, tras lo cual volvieron a su país. En un contexto de extrema tensión entre Rusia y sus vecinos miembros de la Alianza Atlántica es complicado pensar en un acto casual.
El presidente francés, Emmanuel Macron, durante la reunión de este jueves en Bruselas Unión Europea
Macron pide que Europa hable con Putin
Por su parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, sorprendió este viernes con unas declaraciones públicas en las que instaba a Europa a volver a hablar con Putin y retomar las negociaciones directamente con el Kremlin en las próximas semanas.
La razón que esgrimió Macron fue que ahora mismo son otros —en clara referencia a Estados Unidos— los que hablan con Rusia y eso deja a Europa fuera de la ecuación.
El presidente francés cree que la única manera en la que el viejo continente puede recuperar el pulso de las negociaciones es hablando directamente con Moscú. De lo contrario, en sus palabras, "nos limitamos a hablar entre nosotros" sin avance alguno.
Macron ya llamó a Putin saltándose el muro diplomático en torno al líder ruso el pasado mes de julio. La conversación fue duramente criticada tanto dentro como fuera de Francia y, sinceramente, no sirvió de nada.
Ahora mismo, Putin entiende que su único interlocutor es Donald Trump, que se encarga de hacerle el trabajo sucio en el frente diplomático. De ahí que el presidente estadounidense insistiera este viernes en que Ucrania debe "moverse rápido" con las cuestiones territoriales, puesto que Rusia "ya lo está haciendo".
La UE fracasa en su propósito de usar los fondos rusos para Ucrania: emitirá eurobonos como solución temporalObvia Trump que Rusia lo único que tiene que hacer es ocupar las tierras que, supuestamente, Ucrania le tiene que ceder a cambio de nada. Y, aun así, formalmente, Putin nunca ha afirmado que el modelo "paz por territorios" le satisfaga. Antes, al contrario.
En su charla de fin de año, Putin repitió todo lo que sus propagandistas occidentales se empeñan en omitir: las causas del conflicto van mucho más allá de tal o cual provincia y tienen que solucionarse. Hasta que no lo hagan y cumplan por completo las exigencias rusas, no habrá paz en Ucrania. Eso lo sabe hasta Steve Witkoff. Y, si no lo sabe, hay que entender que Jared Kushner se lo habrá explicado en alguno de sus viajes conjuntos.