- GEORGE PARKER, CHRIS SMYTH Y ANDY BOUNDS
La cantidad anual que paga Londres es casi el doble de la que pagaba antes del Brexit.
Reino Unido pagará 570 millones de libras en 2027 para reincorporarse al programa de intercambio de estudiantes Erasmus+ de la UE, casi el doble de la cantidad que aportaba antes del Brexit. La reincorporación se integra en el compromiso de ambas partes de hacer lo posible para estrechar relaciones.
El anuncio del miércoles vino acompañado del compromiso de Reino Unido y la UE de cerrar acuerdos para una mejora de las relaciones comerciales en los mercados de alimentos y energía el próximo año.
Erasmus permite a los estudiantes cursar un año en una universidad de un país asociado pagando las mismas tasas que sus homólogos nacionales y es uno de los primeros ejemplos del "reinicio" de las relaciones entre ambas partes.
El programa fue cancelado en Gran Bretaña en diciembre de 2020 por el entonces primer ministro conservador Boris Johnson, que afirmó que representaba una mala inversión porque Reino Unido contribuía "significativamente más" de lo que recibía debido a la baja aceptación del programa por parte de los estudiantes británicos.
Reino Unido aportó entre 200 y 300 millones de libras esterlinas anuales durante los últimos cinco años de su participación en el programa, con una contribución de 296 millones de libras esterlinas en 2019. En su lugar, Johnson creó un programa de intercambio conocido como "Turing" con una orientación global.
Reino Unido se beneficiará de una reducción del 30 % en la contribución inicial a Erasmus exigida por la UE, pero solo durante el primer año, y el acuerdo sobre futuras contribuciones se ha pospuesto a la espera de nuevas negociaciones.
Los ministros insistieron en que el nuevo acuerdo Erasmus estaría abierto a estudiantes de educación superior y estudiantes que realicen prácticas en la UE. De esta forma se intenta responder a las acusaciones de que el programa beneficia principalmente a los jóvenes con mayor situación económica. Argumentaron que el presupuesto general del programa había aumentado a medida que se ampliaba su alcance, asegurando que una mayor contribución permitiría que más jóvenes británicos tuvieran más ventajas que en las versiones anteriores.
De momento, Reino Unido solo ha acordado reincorporarse para el año académico 2027-28.
Posteriormente, entrará en vigor un nuevo presupuesto plurianual de la UE, que probablemente aumentará la contribución del Reino Unido. Entre 2028 y 2034, la financiación total de Erasmus aumentará un 50 % en comparación con el ciclo de siete años anterior, pasando de aproximadamente 26.000 millones de euros a 41.000 millones de euros.
Vivienne Stern, CEO de Universities UK, afirmó que el acuerdo era una "noticia fantástica para Reino Unido, así como para los estudiantes y las universidades de aquí y de toda Europa", y que ofrecería "oportunidades que cambiarían la vida de miles de estudiantes".
Tim Bradshaw, del Grupo Russell de universidades, afirmó que "con un alcance aún mayor que el de programas anteriores, Erasmus+ ofrece fantásticas oportunidades para que estudiantes, adultos y jóvenes se beneficien de nuevas experiencias y aprendizaje. Además, renovará la enorme contribución que los estudiantes y el personal de la UE realizan a la vida en nuestros campus universitarios".
El anuncio se produjo cuando Reino Unido y la UE acordaron avanzar en las conversaciones que, según Nick Thomas-Symonds, ministro del gabinete responsable de las relaciones con la UE, reducirían los costes de la electricidad para los ciudadanos y las empresas británicas.
Ambas partes anunciaron que iniciarían una fase de conversaciones sobre la posibilidad de que Reino Unido participe en el mercado interior de la electricidad de la UE. Los ministros afirmaron que esto impulsaría la inversión en el Mar del Norte y reforzaría la seguridad energética.
Londres y Bruselas también acordaron completar en 2026 las negociaciones sobre un nuevo acuerdo comercial sobre alimentos y bebidas, que se negoció en una cumbre celebrada en Londres en mayo. El acuerdo eliminaría las barreras regulatorias al comercio.
Ambas partes también emitieron un comunicado en el que afirmaban que su objetivo sería acordar la vinculación de sus mercados de carbono antes de la próxima cumbre entre Reino Unido y la UE, prevista para el segundo semestre del próximo año.
Los exportadores británicos de acero, electricidad, fertilizantes y otros bienes con altas emisiones de carbono deberán pagar el impuesto de carbono de la UE desde el 1 de enero del próximo año hasta que se firme dicho acuerdo.
Wopke Hoekstra, comisario europeo de clima, declaró en una rueda de prensa que confiaba en una rápida conclusión. "Cuando veamos lo descarbonizado que está ya el suministro eléctrico de Reino Unido en esta etapa, el precio que pagarán será mínimo", añadió.
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