Cuatro años del volcán de La Palma
Cuatro años del volcán de La Palma
Tajogaite es un término de origen guanche que significa algo parecido a montaña rajada, monte partido o lugar de grietas, y eso fue lo que pasó. El volcán se partió, se agrietó, estalló, detonó, reventó, transformando para siempre la isla de La Palma. Hoy, 25 de diciembre, se cumplen cuatro años desde que el volcán de La Palma quedase oficialmente apagado.
Todo comenzó el 19 de septiembre de 2021 a las 14.13 horas y a partir de ahí la isla cambió por completo. La vida de miles de habitantes que lo perdieron todo viendo como sus viviendas quedaban enterradas bajo la lava junto con sus pertenencias y los recuerdos de toda una vida; el día a día de miles de agricultores que vieron como su principal fuente de ingresos quedaba sepultada por una ceniza que 1.559 días después regala un paisaje de luto tan bello como devastador y también, inevitablemente, el deporte local, clubes de fútbol, surfistas, atletas y uno de los símbolos de los palmeros, la lucha canaria, sufrieron las terribles consecuencias de la naturaleza que arrasó con todo lo que encontraba a su paso destrozando proyectos, ilusiones y sueños.
Son muchas las historias que nacieron por culpa de la lava y la ceniza. Como la del CD Argual femenino o la del club de lucha canaria Tamanca-Las Manchas, clubes deportivos que perdieron sus instalaciones como consecuencia de los ríos de lava que asolaron la isla y que cuatro años después se sientan con MARCA para recordar con tristeza y rabia, esos 85 fatídicos días.
Otro deporte que sufrió la ira del volcán fue el surf. La naturaleza es así de caprichosa, te quita y te da, aunque lo que te termina devolviendo no sea en las mismas condiciones y te haga recordar cada día que perder una de tus playas más queridas fue como sufrir la pérdida de un familiar muy querido.
Sin embargo, a pesar de toda la tristeza y pérdidas materiales que supuso la erupción del volcán de Tajogaite, también hay historias bonitas a nivel deportivo con final feliz que tuvieron lugar en ese 2021 en la isla de La Palma. Una de ellas, quizá la más especial, la protagoniza el equipo de fútbol del Atlético Paso que en esa temporada 21-22 vivió la mejor campaña de su historia al lograr un ascenso histórico a 2ª RFEF.
Fútbol, lucha canaria, surf... Multitud de deportes que se vieron afectados por las consecuencias del volcán y que también servían como vías de escape a todo lo que se estaba viviendo, pero la realidad era muy diferente. Más de 7.000 personas tuvieron que ser evacuadas y perdieron sus casas. Casi 3.000 viviendas terminaron sepultadas desapareciendo pueblos enteros.
La dura y cruda realidad de haberlo perdido todo sin esperarlo, sin poder haber hecho nada por evitarlo más que observar incrédulo y desarmado cómo ríos de lava y ceniza se llevan tus bienes y tus recuerdos por delante para siempre. La realidad de empezar de cero en otra localidad, en otro barrio, al lado de otra gente sin tus cosas ni tus pertenencias y sobre todo sin apoyo ni ayudas.
La inercia te lleva a construir lejos del que fue tu hogar, si es que tienes esa posibilidad, si no obligado a empezar desde cero en las opciones que te ofrecen. Cerca de 200 personas fueron reubicadas en 85 casas contenedores donde cuatro años después siguen viviendo sin poder hacer frente al recuerdo de ese fatídico 19 de septiembre de 2021.
Cuatro años después en La Palma se respira resignación, rabia y necesidad de ser escuchados. Se sienten olvidados y desamparados esperando ayudas que les prometieron que llegarían y que se han quedado por el camino. Vida y deporte que han ido de la mano durante todo este tiempo. Tiempo que les ha obligado a adaptarse y reinventarse empezando desde cero observando al volcán día tras día sin guardarle ningún rencor y con la esperanza de que algún día todo vuelva a ser como lo era antes de ese 19 de septiembre de 2021.