El grupo Sushita suma una nueva novedad este 2025 con la apertura de su primer restaurante fuera de Madrid y el noveno de la firma. Málaga ha sido la ciudad escogida para este hito que marcará un antes y un después en la historia del grupo. Además, se encuentra situado en el local del conocido 'El Chinitas', y el nombre escogido es Sushita Chinitas.

La superficie del restaurante es de 300 metros cuadrados distribuidos entre la planta baja, los dos salones privados y la terraza. Posee una capacidad para un máximo de 150 comensales y también forma parte del local la primera tienda de vajillas Eugenia&Sushita que habrá en Andalucía, un proyecto que cuenta con la colaboración de Eugenia Martínez de Irujo, hija de la Duquesa de Alba.

Así es el nuevo restaurante del grupo Sushita en Málaga

Cerca de la calle Larios, los amantes de la cocina asiática de Málaga podrán probar platos como la tosta de hamachi y aguacate con jengibre, la gilda de atún rojo con encurtidos, el dim sum bao de pato y foie con salsa hoisin y fresas o la merluza estilo nikkei con verduras en escabeche.

La comida de Sushita Chinitas está elaborada con materias primas de máxima calidad como el salmón noruego de pesca sostenible y el agua alcalina, así como de productos de proximidad procedentes de productores locales malagueños, pruebas que refuerzan el compromiso del grupo por la sostenibilidad y el producto de cercanía.

La propuesta líquida también es un punto a destacar. Compuesta por clásicos como el margarita y el mojito y cócteles de autor que fusionan lo tradicional con lo oriental. Destacan el Ginger Paloma con tequila Patrón, zumo de pomelo, zumo de lima, sirope de jengibre y soda, y el Mango Picante Colada, hecho con ron Bacardí, leche de coco, zumo de piña, sirope de mango, salsa tabasco y zumo de lima.

Con un horario ininterrumpido de 12:00 a 00:30, de lunes a domingo, el local cuenta con una decoración que toma como inspiración el Parladé. El azul es el color protagonista en las paredes que están decoradas con piezas procedentes de anticuarios de Sevilla, Málaga y sur de Francia. Parte de la antigua decoración del local se ha respetado, dejando intactos elementos como las contraventanas de madera o los faroles de la entrada.