El aceite de rosa de mosqueta es uno de los aceites vegetales de los que más hemos oído hablar. Es conocido por sus propiedades regenerativas, hidratantes y antioxidantes. De hecho, es uno de los más utilizados para combatir las estrías.

Sin embargo, las propiedades de este aceite vegetal van mucho más allá, ya que como dice Carolina Robla, experta en cosmética natural y fundadora de la marca Natural Carol y Natural Cosmetic Lab: "Su composición es una de las más completas dentro de los aceites vegetales".

Qué es la rosa de mosqueta y por qué funciona

El aceite de rosa mosqueta se extrae del prensado en frío de las semillas del fruto de la Rosa rubiginosa o Rosa canina, un arbusto silvestre de origen europeo. Este proceso artesanal permite conservar intactas sus propiedades naturales y obtener un aceite rico en ácidos grasos esenciales (omega 3, 6 y 9), vitaminas A, C y E y antioxidantes vegetales como flavonoides y betacarotenos.

Carolina Robla habla sobre la primera de las cualidades del aceite de rosa de mosqueta: "Actúa sobre la barrera cutánea, ayudando a restaurar su función protectora y mejorando la capacidad de la piel para retener agua. Por eso es tan eficaz frente a la sequedad y la descamación que suelen aparecer en invierno".

Además, de ser altamente nutritiva la rosa de mosqueta es también conocida por su poder regenerador, ya que favorece la renovación celular y estimula la producción natural de colágeno y elastina, dos componentes esenciales para mantener la firmeza y la elasticidad de la piel. También tiene un marcado efecto calmante y antiinflamatorio, ideal para aliviar la tirantez o el enrojecimiento tras la ducha o la exposición al frío.

Por último y no menos importante, funciona como un antioxidante, con lo cual al utilizarla estamos previniendo a nuestra piel del fotoenvejecimiento y el extrés oxidativo. Con su uso, luciremos una piel más luminosa, flexible y uniforme con el paso del tiempo.

La rosa de mosqueta, tu mejor aliada para el invierno

La bajada de temperaturas, la falta de humedad ambiental y la calefacción alteran su equilibrio natural y hacen que nuestra piel se vuelva más seca y sensible. En general, nos solemos centrar más en el cuidado de la piel de la cara, sin embargo, la del resto del cuerpo también sufre mucho.

En este contexto del invierno, el aceite de rosa de mosqueta se puede convertir en tu gran aliado porque ayuda a nutrir, reparar y proteger la piel, devolviéndole elasticidad y suavidad.

Como bien explica Carolina Robla: "Durante el invierno, la piel tiende a perder lípidos y a volverse más sensible por los cambios de temperatura. Los aceites vegetales como el de rosa mosqueta ayudan a reforzar la barrera cutánea y mantener la hidratación natural, algo clave para prevenir la sequedad y la descamación".

Explicadas todas las virtudes del aceite de rosa de mosqueta para nuestra piel no hemos podido evitar hacer un pequeño bazar para que encuentres el que más se adapte a tu estilo de vida.

Aceites de mosqueta para que no te falten este invierno

Natural Carol presenta este aceite corporal de macadamia y rosa de mosqueta que tiene una textura sólida que se funde suavemente al contacto con la piel, dejándola nutrida, revitalizada y visiblemente más elástica. (Precio: 24, 95 euros / 75gr).

Esta crema facial de Rosa de mosqueta de Saluvital sirve tanto para el día como para la noche para un tratamiento diario de la piel con un 81,93% de ingredientes naturales. Su ingrediente principal es aceite natural de rosa mosqueta, con el que conseguirás un efecto regenerador/reparador de la piel. (Precio de Venta Recomendado: 15,35 euros / 50 ml).

Biocelular aceite rosa de mosqueta de Massada es una untuosa loción indicada para reestructurar la piel de todo el cuerpo. Mejora el tono y la elasticidad a la vez que mitiga las manchas y estrías. Regenera y aporta una profunda hidratación, incluso a las pieles más delicadas. (Precio: 43,90 euros / 100 ml).