El brazo empresarial del Estado con el encargo del Gobierno de rescatar empresas estratégicas en la pandemia supo y autorizó pagos de la aerolíneaPlus Ultra en Gibraltar y Suiza con dinero público. Fueron pagos por oscuros préstamos que la Fiscalía Anticorrupción considera actualmente delictivos por responder a actividades de blanqueo de altos cargos venezolanos.
Según la documentación a la que ha tenido acceso EL MUNDO, Plus Ultra informó a la Sepi de estos préstamos firmados en 2020 y 2021 por 1,3 millones de euros con sociedades del holandés Simon Leendert Verhoeven, investigado actualmente por las fiscalías suiza y francesa como cabecilla de esta trama de lavado de dinero ligada a Venezuela. Incluso le facilitó los contratos firmados por el propio Verhoeven con el actual presidente de Plus Ultra y entonces principal accionista español, Julio Martínez Sola.
En uno de ellos, Verhoeven se identifica como «prestamista» de Plus Ultra residente en Suiza y realiza la entrega de 450.000 euros a través de la sociedad Valerian Corporation Limited domiciliada en Gibraltar.
En este contrato del 29 de enero de 2021 -ver el extracto adjunto reproducido-, el actual presidente de Plus Ultra -que se encuentra en libertad condicional tras su detención hace 10 días- justificaba la necesidad de recurrir al turbio Verhoeven por la tardanza de la Sepi en rescatar la aerolínea. «Hemos sabido que la Sepi no cuenta con los recursos materiales y humanos suficientes para la tramitación de la totalidad de las solicitudes de ayudas recibidas en un plazo óptimo para las necesidades de las empresas encontrándose a día de la fecha la solicitud de la compañía en proceso de análisis».
Primera página de uno de los contratos entre Plus Ultra y Leendert Verhoeven. E. M.El hólding estatal había resuelto ya en menos de dos meses una ayuda de 475 millones a Air Europa, pero se estaba tomando más tiempo con Plus Ultra y Duro Felguera. Según el contrato de Martínez Sola con Verhoeven, «ello supone una demora en la recepción de las ayudas requeridas con carácter de urgencia hasta, según las estipulaciones de la Compañía, principios del año 2021».
La operación se estructuró como un crédito puente, de modo que quedaba ligado automáticamente al rescate público con pleno conocimiento de la Sepi, según la documentación revisada por este diario. La Sepi declina por su parte oficialmente hacer comentarios sobre estos préstamos alegando la confidencialidad de su acuerdo con Plus Ultra y resto de empresas rescatadas.,
Interés del 9%
Verhoeven impuso un tipo de interés del 9%, una comisión para él del 2% y una obligación de pago en cuanto Plus Ultra recibiera el rescate. «La prestataria se obliga al pago de los intereses devengados y las comisiones y a la devolución del capital prestado de forma automática cuando tenga a su disposición los fondos procedentes de la Sepi tras la concesión de la ayuda pública». Este préstamo de Valerian se produjo ya con las negociaciones de la aerolínea muy avanzadas con la Sepi.
Previamente, el propio Verhoeven prestó el 28 de octubre de 2020 500.000 dólares a Plus Ultra a través de la británica Wailea Invest. Un mes después, entregó otro medio millón desde la suiza Allpa Wira en condiciones idénticas de pago automático en cuanto la aerolínea, entonces de mayoría de capital venezolano, recibiera la inyección del Estado.
Segunda página de uno de los contratos entre Plus Ultra y Leendert Verhoeven. E. M.Otro préstamo de Panamá
Las negociaciones de Plus Ultra con la Sepi fructificaron en marzo de 2021 con la aprobación final del rescate de 53 millones por parte del Consejo de Ministros a propuesta de la entonces titular de Hacienda, María Jesús Montero. El dinero fue empleado para liquidar, entre otros, estos tres préstamos investigados y otro de 450.000 euros de Panacorp, el banco panameño ligado a los propios accionistas de la aerolínea.
Aunque no está actualmente en el radar de la Fiscalía como los otros tres, las condiciones del préstamo son llamativamente idénticas. Panacorp es el gran sostén financiero de Plus Ultra tras el Estado y no entró en quiebra antes de la pandemia gracias a un crédito a largo de plazo de 6,3 millones desde Panamá.
Todo ello fue conocido y verificado por el Estado. La actual vicepresidenta primera del Gobierno tiene como uno de sus ejes de discurso político la lucha contra la evasión, el blanqueo y los paraísos fiscales.
La documentación corrobora la versión de las fuentes consultadas en Plus Ultra el día de la detención de Martínez Sola y es que éste no ocultó nunca estos préstamos al Estado. «Los préstamos que se solicitaron fuera de España al tener empresas como la nuestra el crédito cerrado en España, fueron legales, públicos y trasparentes.
Estaban detallados en la documentación que se presentó a la Sepi para acceder al Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, cuyas normas de aplicación ni impedían ni excluían su amortización con los fondos obtenidos», señalaron entonces en la aerolínea. Según su versión, Martínez Sola no conocía a Verhoeven y les puso en contacto el entonces principal accionista de Plus Ultra, el venezolano Rodolfo Reyes.
53 millones de euros del Estado
El rescate. Fue definitivamente aprobado para Plus Ultra en marzo de 2021 por valor de 53 millones a través de un préstamo ordinario y otro participativo. El entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos, se desmarcó desde el primer momento, aunque dos informes favorables de su Departamento fueron utilizados por el Gobierno para arropar esta ayuda al grupo de capital venezolano.