Las ciberamenazas modernas no miden desde hace tiempo su efectividad por explotar simplemente la tecnología. Ahora lo frecuente es eludir la seguridad tradicional para lanzar ataques de ingeniería social hacia personas, ampliando sus tácticas y explotando canales adicionales más allá del email, aunque este continúe como principal vector de amenaza.

Independientemente de si logran comprometer una cuenta de correo electrónico, una red social o una plataforma colaborativa, los atacantes buscan consolidar su presencia, evadir la detección y preparar las siguientes fases del ataque. Según un estudio de Verizon, nueve de cada diez incidentes de seguridad involucran al factor humano. Además, al analizar en detalle se confirma que la mayoría de usuarios realiza acciones de riesgo, incluso siendo conscientes de ello.

Fortalecer la concienciación y la resiliencia humana es esencial para defenderse de las amenazas. Entre las tendencias que siguen hoy los ciberdelincuentes destacan la distribución de ataques con URL maliciosas a través de múltiples canales digitales como herramientas de colaboración y mensajería, redes sociales, aplicaciones en la nube o servicios de intercambio de archivos, lo que dificulta la detección y la defensa.

Las personas pueden creer fácilmente que interactúan con alguien de confianza, pero en realidad podrían estar relacionándose sin saberlo con un ciberdelincuente; y esto aumenta la probabilidad de éxito del intento de fraude.

Asimismo, los atacantes suelen aprovechar credenciales débiles, técnicas de phishing o ingeniería social para tomar el control de cuentas de usuarios y proveedores, dando lugar a accesos no autorizados a datos sensibles y pérdidas económicas, entre otras consecuencias.

Cuando se recibe una formación en ciberseguridad continua y adaptada, las personas adquieren las herramientas necesarias no solo para identificar las amenazas a las que pueden enfrentarse, sino también aplicar luego esos conocimientos en la práctica.

Sin embargo, depende de cada persona detenerse, reflexionar y actuar de manera acertada en el momento de la verdad. Al fin y al cabo, el comportamiento de los usuarios será el que conforme una sólida defensa frente a los ciberataques en la actualidad.

Cómo identificar a los ciberdelincuentes antes de que sea tarde

Estas son algunas prácticas recomendadas para identificar a los ciberdelincuentes antes de que sus campañas maliciosas vulneren las cuentas de los usuarios:

• Multicanalidad de las amenazas: los ciberdelincuentes están más que preparados para atacar a través de múltiples canales digitales, ya sean las redes sociales, el correo electrónico y los mensajes de texto, por lo que los intentos de phishing pueden manifestarse en cualquier plataforma.
• Atención a las comunicaciones de terceros: si el usuario suele recibir en su puesto de trabajo solicitudes de proveedores o vendedores, debe mostrarse muy cauto antes de tomar medidas. Cualquier cambio en datos de pago o demandas urgentes inusuales tiene que comprobarse con los contactos habituales previos para evitar fraudes.
• Protección contra las amenazas BEC: del mismo modo que con las estafas de proveedores, si llega un correo electrónico al trabajo en el que se solicite alguna acción delicada, como transferir fondos o acceder a datos confidenciales, primero debe confirmarse dicha petición por otro método de comunicación. De este modo, el destinatario se asegurará de no caer en amenazas como los ataques BEC, que usan diversas técnicas de suplantación de identidad y de dominios.
• Vigilar comportamientos en el entorno online: respecto a toda actividad sospechosa, o si hay algo que parece extraño en un mensaje o una interacción, es importante denunciarlos inmediatamente dentro de la propia plataforma.

La proactividad marca la diferencia

Ser proactivo permite detener las amenazas antes de que escalen a incidentes de gravedad. La tecnología es una aliada clave para reforzar la seguridad, pero solo la verdadera concienciación de los usuarios frente a los riesgos impulsará un cambio significativo y garantizar su efectividad.