Wednesday, 10 de December de 2025
Política

El casting del fracaso de Sánchez: de los escándalos de sus 'elegidos' a la caída de sus fieles de la foto de Ferraz

El casting del fracaso de Sánchez: de los escándalos de sus 'elegidos' a la caída de sus fieles de la foto de Ferraz
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De sus 32 leales en el asalto al PSOE en las primarias de 2017, sólo tres sobreviven en la cúpula. Además, sus tres grandes apuestas son los que han generado las mayores controversias que cercan al partido Leer

"Solo tres personas sabíamos el número de avales recogidos: Santos Cerdán, Paco Salazar y yo", escribe Pedro Sánchez en su libro Manual de resistencia, narrando el proceso de primarias que en 2017 le llevó a recuperar la Secretaría General del PSOE. Muchos son los que reciben mención en este relato, en el que el hoy presidente del Gobierno reconoce a quienes le acompañaron en aquella carrera a la cúpula de Ferraz: "En aquellos tiempos hay varias personas del partido que van fortaleciendo sus vínculos conmigo: José Luis Ábalos, Adriana Lastra, Santos Cerdán, Sofía Hernanz, Francisco Quico Toscano, Susana Sumelzo y Rafa Román son algunos de ellos. Vamos creando una complicidad muy especial que, en algunos casos, no existía". "Otras personas que desde el primer momento me apoyaron fueron Iratxe García, y María Luisa Carcedo", añade luego.

La mayoría de ellos acompañó a Sánchez durante todo el proceso de primarias, y se congregó la noche del recuento en el despacho del hoy presidente en Ferraz para celebrar el resultado. De aquella treintena de personas que le había dado apoyo, muchos luego se vieron reconocidos con un cargo en la Comisión Ejecutiva Federal del partido que el propio Pedro Sánchez designó. Entre ellos, el secretario general situó a tres en lo más alto de la sala de máquinas: a Ábalos lo nombró secretario de Organización y a Cerdán y a Salazar los situó en este departamento, bajo la directriz del ya ex ministro.

Hoy, aquellos que fueron sus tres principales apuestas se han convertido en sus tres mayores escándalos. "Yo he asumido esas responsabilidades. No diciendo 'Luis, sé fuerte', sino expulsando a estas personas", expuso Sánchez el martes de la semana pasada en una entrevista en el canal catalán de TVE. Le preguntaban por Ábalos y Cerdán, aunque la respuesta parece extensible.

El último de los caídos del núcleo duro del presidente del Gobierno es Paco Salazar. Más allá de sus cargos en la cúpula de Ferraz, este dirigente acompañó a Sánchez durante toda su etapa en La Moncloa: primero como director general del Departamento de Análisis y Estudios de la Presidencia del Gobierno (2018-2019), después como director adjunto a la Presidencia (2020-2021), como secretario general de Planificación Política del Gabinete de la Presidencia (2022-2024) y como secretario general de Coordinación Institucional. De este último cargo cesó en julio de 2025, tras destaparse el presunto acoso sexual que hoy le mantiene en el foco.

Sánchez no tuvo más remedio que romper su silencio sobre este asunto en el tradicional corrillo tras el acto institucional del Día de la Constitución, cuando descartó rotundamente que el PSOE vaya a elevar el caso a la Fiscalía, tal y como le han reclamado las responsables de Igualdad de varias federaciones y feministas relevantes como su ex número dos en la dirección de Ferraz, Adriana Lastra, arguyendo que es constitutivo de un delito de violencia de género. "Legalmente no es posible. Deben ser las denunciantes", zanjó.

El presidente asumió además "en primera persona" que ha habido "un error en la velocidad" de la respuesta a las dos mujeres que acusan a su ya ex asesor de comportamientos machistas, de los que aseguró haberse enterado por la prensa. Además, este domingo destituyó de manera fulminante a Antonio Hernández, mano derecha de Salazar en La Moncloa. Está por ver si queda así sellada la grieta interna en el PSOE.

Salazar estaba entre la treintena de dirigentes que posaron aquel 21 de mayo de 2017 en el despacho de Sánchez en Ferraz. De las 31 personas que figuran en esa ya icónica fotografía -32 sumando a Cerdán-, 18 formaron, antes o después, parte de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, con el hoy presidente del Gobierno al frente. Sin embargo, en la nueva cúpula que se definió en julio, tras el escándalo de Cerdán y el de Salazar, solo tres de aquellos primeros fieles siguen acompañando a Sánchez: el ministro Óscar Puente, la eurodiputada Iratxe García y Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, diputado y vicepresidente del Congreso.

El resto ha tomado cierta distancia con el partido a nivel orgánico en los últimos años, aunque sin soltar del todo la mano de aquel al que auparon a la Secretaría General del PSOE hace ocho años. Trece de los 31 que aparecen en la foto celebrando la victoria en las primarias ejercen en un cargo designado por el Gobierno -o en el que el Ejecutivo influye en cierta medida-, y tres más lo han hecho en el pasado.

Por ejemplo, entre quienes recorrieron la geografía española con Sánchez en las primarias de 2017 estaban José Félix Tezanos, actual presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), y Beatriz Corredor, presidenta de Redeia -empresa de la que el Estado, a través de la SEPI, es accionista mayoritario-. También estaban Carmen Calvo, presidenta del Consejo de Estado, y Susana Sumelzo, secretaria de Estado para Iberoamérica y el Caribe y el Español en el Mundo. Y Manuel González, que está en el Consejo de Administración de Enagás; Carlos Ruiz, que preside Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya; y Sofía Hernanz, al frente de la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios y de la Seguridad del Estado (SIEPSE), empresa pública. Andrés Perelló, asesor del crowdfunding con el que Sánchez financió su campaña de primarias, fue luego embajador en la UNESCO. Y en aquella treintena de fieles estaban también María Luisa Carcedo -ex ministra-, Óscar Puente y Margarita Robles -ministros-, y Adriana Lastra -delegada del Gobierno en Asturias-.

De todos ellos, Sánchez eligió a Ábalos, Cerdán y Salazar para estar en lo más alto de Ferraz en su vuelta a la Secretaría General del partido. El presidente del Gobierno ha venido defendiendo en los últimos meses que no supo nada de las presuntas irregularidades que cometieron los dos primeros en el marco del caso Koldo y sus cuestionables comportamientos -"era un gran desconocido para mí desde el punto de vista personal", llegó a afirmar esta semana sobre Ábalos-. Sin embargo, entre aquellas otras personas que le acompañaron en el camino de las primarias sí hay a quienes les saltaron las alarmas: la ex diputada socialista Zaida Cantera dijo hace unos días que desde Navarra le advirtieron sobre Cerdán -en lo relativo a irregularidades financieras- y Carmen Calvo recordó que le llegaron "rumores" sobre las relaciones de Ábalos con mujeres. Y la ex pareja del ex ministro, Carolina Perles, aseguró que transmitió a Lastra y a Maritcha Ruiz, entonces responsable de Comunicación del PSOE, que Ábalos "se veía con prostitutas".

Todas ellas, como ellos, acompañaron a Sánchez en el camino de su regreso a la cúpula de Ferraz, pero el presidente insiste en que no supo nada hasta que estallaron los escándalos. En el caso de Salazar, el tercero de sus grandes apuestas, por ahora Sánchez alarga el silencio.

ESTOS SON 'LOS 31' DE SÁNCHEZ

En el despacho de Sánchez en Ferraz: 1, Mariló Ruiz; 2, Zaida Cantera; 3, Míchel Montaner;4, Mª Luisa Carcedo; 5, Beatriz Corredor;6, Margarita Robles;7, Adriana Lastra;8, Manuel Escudero;9, Carles Ruiz;10, José Luis Ábalos;11, Carolina Perles;12, Rocío Frutos; 13, Sofía Hernanz;14, Magdalena Pérez-Castellón;15, Susana Sumelzo;16, Odón Elorza;17, José Félix Tezanos;18, Mª Luisa Faneca;19, Andrés Perelló;20, Mª Luz Martínez Seijo;21, Carmen Calvo;22, Manuel González;23, Xisco de la Cruz;24, José Sanroma;25, Ismael Bosch;26, Óscar Puente;27, Iratxe García;28, Francisco Pérez;29, Paco Salazar;30, Begoña Gómez;31, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis.

Fuente original: Leer en El Mundo - España
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