Ultraviolette Automotive, aterriza por fin en España. La marca india lo hace de la mano de Rhino Electric Motors (matriz de Velca) tal y como adelantó EXPANSIÓN en exclusiva. Nos hemos subido a ellas...
La marca de motos eléctricas india Ultraviolette Automotive es una de las más disruptivas del momento y llega por fin a nuestro mercado de la mano de Rhino Electric Motors (la matriz de Velca) que ha firmado un acuerdo para importar oficialmente su motos. Las primeras son las dos versiones de la F77, laMach 2 Recon y SuperStreet Recon, tanto para España como para Portugal. Velca será, además, la encargada de la comercialización y el servicio posventa apoyándose en su red de más de 80 puntos de venta y cientos de talleres asociados. Es un movimiento que la propia compañía definió como un "salto de categoría" dentro de la movilidad eléctrica, y que consolida su estrategia de combinar catálogo urbano con modelos de mayor rendimiento.
Pero antes de ir con ellas...
¿Quién es Ultraviolette Automotive?
Detrás de ella están Narayan Subramaniam, cofundador y consejero delegado (CEO), y Niraj Rajmohan, cofundador y director tecnológico (CTO), dos ingenieros que han consolidado el posicionamiento de la compañía como uno de los fabricantes eléctricos más avanzados del mercado indio y por ende, del mundo. Nacida en Bengaluru su ambición es clara: crear motos eléctricas de altas prestaciones capaces de competir con modelos de combustión en diseño, sensaciones y rendimiento real.
Los cofundadores de Ultraviolette, Niraj Rajmohan, su CTO (sobre la moto), y Narayan Subramaniam, su CEO.Ultraviolette inició su expansión internacional focalizándose en Europa, con la entrada en países clave. Primero Francia, semanas después España y Portugal, y poco a poco, Alemania, Italia, Reino Unido, Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Austria, Suiza e Irlanda. Estos mercados fueron elegidos por su madurez, tradición motociclista y exigencias normativas que validan la calidad y homologación de la F77. De cara a 2026, tiene previsto consolidar esta presencia en Europa y empezar a mirar hacia regiones como el Sudeste Asiático y Latinoamérica.
¿qué Grandes inversores tiene Ultraviolette detrás?
Su estrategia de financiación ha atraído a inversores de perfil corporativo y tecnológico. Entre ellos destaca TVS Motor Company, uno de los mayores fabricantes de motocicletas de India y uno de los primeros inversores en la marca. TVS lideró parte de la ronda Serie C de Ultraviolette y mantiene una participación significativa en el capital, consolidándose como su "early backer". A su lado figuran también Zoho Corporation y el fondo Lingotto (antes Exor Capital). Según información pública de la compañía, estos inversores han acompañado las rondas más recientes destinadas a escalar la producción global y a financiar la entrada en mercados internacionales. En 2025, además, la empresa sumó capital de TDK Ventures para reforzar su capacidad de ingeniería y baterías.
Las F77 SuperStreet Recon y Mach 2 Recon. Fíjese en el manillar.Dos versiones, una misma idea
La F77 que llega al mercado europeo, en versiones Mach 2 Recon y SuperStreet Recon, comparte el mismo ADN técnico que ha hecho destacar a Ultraviolette en India. Ambas montan un motor eléctrico de imanes permanentes que no esconden su gran baza: 9,5 kW de potencia contínua (unos 13 CV equivalentes) con lo que se puede conducir con el carné A1 o el B (de coches y tras los años reglamentarios de tenencia) pero con30 kW de potencia pico (40 CV equivalentes) y 100 Nm de par. Una locura, gestionada por un software de entrega inspirado en estándares aeronáuticos. Utilizan una batería SRB10 de 10,3 kWh, alojada en una carcasa de aluminio, y gestionada por un BMS propio que integra cinco capas de seguridad (mecánica, térmica, eléctrica, electrónica y software). La plataforma admite recarga por estándar europeo y viene acompañada de un cargador rápido capaz de llevar la batería del 20 % al 80 % en unas dos horas y media.
Las prestaciones se sitúan varios escalones por encima del grueso de las eléctricas de uso urbano: 155 km/h de velocidad máxima, 0-60 km/h en 2,8 segundos y aproximadamente 7,7 segundos en el 0-100 km/h, cifras ya propias de una 300cc / 400 cc térmica. La autonomía declarada para ambas versiones alcanza los 323 km (IDC) y alrededor de 231 km en ciclo WMTC, más representativo del uso europeo. Pero ya se sabe, estos datos son prácticamente imposibles de lograr en una conducción normal.
La parte ciclo mantiene un enfoque claramente deportivo: chasis tipo 'trellis', horquilla invertida de 41 mm, monoamortiguador ajustable y frenos (doble 320 mm delante y uno 230 mm detrás) con ABS de doble canal de Bosch. El peso ronda los 207 kg, una cifra elevada para una eléctrica de este segmento, pero que la marca compensa con una gestión electrónica muy afinada y hasta 10 niveles de regeneración.
En cuanto a electrónica, las F77 incorporan modos de conducción que no dejan lugar a sus intenciones (Glide, Combat y Ballistic), conectividad completa (Bluetooth, WiFi, LTE), pantalla TFT de 5 pulgadas y el sistema inteligente Violette A.I., que analiza parámetros de conducción y ajusta la entrega de potencia, la regeneración y la estabilidad. Incluye funciones de bloqueo remoto, localización GPS, mantenimiento predictivo y un modo de ahorro energético 'Deep Sleep'.
Entonces en qué se diferencian, nos subimos a ellas
La diferencia real entre la Mach 2 Recon y la SuperStreet Reconno está en el motor, sino en la ergonomía y el enfoque. La Mach 2 Recon apuesta por una postura más deportiva, con un carácter más agresivo en la parte ciclo; la SuperStreet Recon, por su parte, eleva el manillar para ofrecer una posición más cómoda y orientada a la conducción diaria, sin renunciar a las mismas prestaciones.
En ambos casos, las unidades llegan a Europa como CBU (completamente ensambladas en India) y ya pueden reservarse, con precios que arrancaban en 8.990 € para la Mach 2 Recon y en 9.290 € para la SuperStreet Recon.
Para probarlas, nos vamos a un entorno peculiar: el circuito de Ángel Burgueño en Pedrezuela, a las afueras de Madrid. Es un circuito de karts, es cierto, pero el trazado nos permitirá ver su comportamiento en los cambios de dirección y su aceleración. El día es inmejorable: buena temperatura y cielo despejado. Nos ponemos el mono y salimos a rodar con ellas. Primero con la Mach 2 y luego la SuperStreet.
Nada más acerarse a ella, una cierta incredulidad toma protagonismo. La moto está impecablemente rematada y su apuesta tecnológica parece casi de mentira. ¿Un anticipo de lo venía? A sus mandos uno encuentra que es una moto de dimensiones ajustadas, pero que no resulta pequeña ni mucho menos, y al encenderla la adrenalina se levanta de la silla. El asiento es correcto, algo duro si tuviera que definirlo, pero perfecto para rodar con ella en este revirado y corto circuito. No es quizás su espacio natural, pero más que se defiende, es divertida.
La aceleración en el modo Ballistic es sorprendente, brutal diría y ajusto la retención en el grado 4 y 5 (hay que recordar que tiene frenada regenerativa en 10 niveles), quizás lo más parecido a una moto de combustión. En el modo 0 (lo que en otras motos es el modo vela), la moto se deja ir al soltar el puño en un exceso que no tiene demasiado sentido por dos razones: puede resultar peligroso al no poder despojarnos de la retención que tiene toda moto de comustión a la hora de calcular la frenada al llegar, por ejemplo, a una curva; y que hace se tenga que trabajar mucho con los frenos. Las pinzas están bien elegidas... para carretera. No sería justo criticarlas abiertamente pues no las hemos probado circulando, pero sí es cierto que en el circuito notaban el exceso de trabajo en la bomba.
Los cambios de dirección los acomete de maneramuy directa ya que gusta de entrar fuerte, frenar justo antes y luego acelerar a fondo. A medida que pasan los giros empiezo a tumbar cada vez más y más ¡qué buena sensación! Hasta que en una de las curvas más cerradas ocurre lo inevitable... se cierra la dirección. Y es que la horquilla tiene algo forzado el ángulo, nada grave, pero en el circuito, forzarla hasta el límite tiene ese riesgo. La caída, sin consecuencias, tan solo la estribera izquierda cede al impacto.
La puesta en escena es extraordinaria, perfectamente rematada y con la tecnología a flor de piel; nada más encenderla la adrenalina se levanta de su asiento
Subirme a la SuperStreet y encontrarme una postura bien distinta fue automático. Su postura a los mandos modificia todo, se relajan los hombros permitiendo una mejor toma de las curvas con el cuerpo algo más erguido y, curiosamente, la curva que ve mi caída con la anterior se convierte en una más. Es la más cómoda de conducir sin duda.
Acelerar y frenar, acelerar y frenar... divertida y con solvencia. Aceleración balística dicen, no hay duda de ello. En carretera no me cabe duda que su comportamiento será aún mejor. Ya la probaremos.
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