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El sector del automóvil en su conjunto, en colaboración el Gobierno, los partidos políticos, sindicatos y otros actores implicados, por fin ha conseguido ir en la misma dirección y fruto de esta colaboración es el Plan España Auto 2030, presentado este miércoles, que contempla diferentes medidas, propuestas y actuaciones que harán que España siga teniendo un papel de liderazgo en la industria europea del automóvil, ya que ahora es el segundo mayor fabricante de vehículos del continente.
El plan lo presentó este miércoles el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que estuvo acompañado de una amplia representación del automóvil, así como del ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, y de la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen.
Este documento, que recoge 25 medidas prioritarias y seis acciones "estrella", nace con ambiciosos objetivos que deben motivar que España siga teniendo una posición de privilegio en la industria automovilística europea, para lo que cuenta con objetivos medibles y adaptables a lo largo de los cinco próximos años en función de los avances y la realidad del mercado.
Esta hoja de ruta, que ha estado capitaneada por el presidente de Anfac, Josep Maria Recasens, busca reconvertir el modelo actual de la industria automovilística española de uno basado en el vehículo de combustión a otro que se sustente en la movilidad eléctrica y también en otros pilares que afecten al conjunto de la cadena de valor del automóvil.
Recasens, en su intervención, afirmó que hay que hacer algo si España no quiere quedarse relegada en la competición del sector del automóvil que está en pleno proceso de transformación hacia la movilidad eléctrica y en pleno desembarco en Europa de nueva competencia procedente de China. "No hacer nada no es una opción", sentenció el también presidente de Renault España y responsable de Estrategia del grupo francés a nivel mundial.
Si se toman las medidas adecuadas, según Recasens, España podría alcanzar un valor añadido bruto del sector del automóvil de 120.000 millones de euros para 2035, lo que supondrá un fuerte incremento del 20% en comparación con los 85.000 millones actuales, mientras que el volumen de empleo se mantendría estable en 1,9 millones de trabajadores, lo que supondría que no se perdería fuerza laboral. De los 85.000 millones de valor añadido bruto actual, 79.000 millones están vinculados con el coche de combustión.
Entre las metas de esta estrategia también se recoge incrementar la producción de las plantas españolas hasta 2,7 millones de unidades, casi 300.000 unidades más que en 2024, lo que representa la producción aproximada de una planta entera. De este total, el 95% del volumen fabricado correspondería a vehículos eléctricos e híbridos enchufables, en comparación con el 10% actual.
En cuanto al mercado, la previsión no es muy ambiciosa, ya que contempla que el volumen de matriculaciones será de alrededor de 1,3 millones de unidades para 2035, con un 100% de modelos electrificados, frente a los 1,2 millones de unidades comercializadas el ejercicio pasado, con un 10% de automóviles electrificados.
Inversión y medidas
La toma de estas medidas de apoyo a la transformación del modelo industrial del automóvil en España impulsará una oleada de inversiones tanto en el ámbito público como en el privado, de entre 36.000 y 39.000 millones en los próximos cinco años, en comparación con los 29.000 millones invertidos en los cinco años pasados, con una media de 5.800 millones anuales.
Para lograr estas metas ambiciosas, la hoja de ruta del sector propone 25 medidas prioritarias que abarcan desde la puesta en marcha de acciones que impulsen el crecimiento y la autonomía industrial vinculadas con la minería, el refino, la producción de baterías o los componentes, al tiempo que también aborda la necesidad de actuar en materia de tecnologías duales.
Además, se propone la puesta en marcha de planes de impulso a la demanda de coches eléctricos más eficaces que el actual Plan Moves, como el que presentó Pedro Sánchez, con incentivos directos en el momento de la compra, en línea con los criterios del Plan Reinicia Auto+, lanzado para ayudar a los afectados por la dana en Valencia. También se contempla seguir apostando por la figura de los Perte del vehículo eléctrico y conectado, con el fin de atraer inversiones y proyectos a España.
Otra las medidas estrella pasa por fomentar la I+D, así como por la creación de un sello de inversiones bien hechas en España y por la continuación y despliegue de un plan de expansión de la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos.
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