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María Caballero, en los pasillos del Senado. EPMaría Caballero
Senadora de Unión del Pueblo Navarro «Cerdán fue capaz de vender Pamplona a Bildu para hacer sus amaños corruptos»Hija de Tomás Caballero, asesinado por ETA, la senadora de UPN alza su voz ahora para interrogar en la 'comisión Koldo' sobre las irregularidades
Domingo, 28 de diciembre 2025, 00:06
... de Unión del Pueblo Navarro en Pamplona Tomás Caballero, asesinado por ETA aquel día de primavera de hace 27 años. La senadora de UPN y también edil en su ciudad natal alza hoy la voz de sus preguntas en los interrogatorios de la 'comisión Koldo' de la Cámara alta, como el muy tenso que la encaró hace un par de semanas con el exdirigente del PSOE Santos Cerdán. De navarra a navarro, dos años después de que los socialistas forjaran con Bildu el pacto que desalojó de la Alcaldía pamplonesa al partido de los Caballero.–¿Intuyeron que esta trama podía llegar a ser como la hidra de siete cabezas?
–Yo no. Cuando llamamos a Cerdán por primera vez, hace año y pico, fue por la responsabilidad que había tenido al aupar a Koldo García. Entonces dio muy pocas explicaciones, decía que Koldo simplemente era un compañero. Yo eso no me lo creí porque sabía que ahí había existido una relación como para conocer cómo era la persona; y me parecía muy grave que, sabiéndolo, hubiera sido capaz de meterlo en un ministerio. Y si lo recibían ministros era por el poder que tenía el que lo había propuesto. Pero no pensábamos que al frente de todo estaba el propio Cerdán.
–¿La comisión es un arma política de la derecha?
–Tanto en el Congreso como en el Senado existe la posibilidad de tener comisiones de investigación para poder exigir responsabilidades, para controlar al Gobierno. Y claro que es un arma: nos la hemos dado los españoles cuando aprobamos la Constitución y el régimen parlamentario. Tenemos que pedir explicaciones y este es el lugar idóneo.
–¿Y está sirviendo realmente para eso, para investigar?
–Sí. Está sirviendo para investigar y, sobre todo, para comunicar a la ciudadanía. Porque hay mucho interés en el Gobierno y en sus socios por tapar.
«Fue bastante miserable»
–¿Esta última comparecencia de Santos Cerdán ha sido la más dura para usted?
–Sí que ha sido la que más me ha implicado en lo personal y en lo político. Porque empezó diciendo que había trabajado para que mi partido, UPN, el más votado en Navarra, no tenga socios de Gobierno. Pero Cerdán no ha ido a la cárcel por haber negociado con Bildu, ni por haber pactado, ni por tratar de quitar los gobiernos a UPN. Él necesitaba que gobernase el Partido Socialista para enriquecerse y urdir una trama.
–Se jactó de haber contribuido decisivamente a la paz.
–Me sentaron muy mal sus palabras. La pregunta que me dirigió, si yo me alegraba del final de ETA, fue bastante miserable. Eso le retrata. Él es navarro, sabe lo que supuso que matasen a mi padre, la conmoción social fue importante. Que me venga a mí a decir esto, a querer atribuirse que él había hecho que esta gente dejase de matar… Hemos estado con mucha gente del Partido Socialista, juntos, manifestándonos contra cada atentado, y yo a este señor no lo recuerdo especialmente activista. Nunca jamás se le ha oído decir nada como para que crea que ha contribuido al final de la violencia. Lo ha hecho bastante más gente anónima. Y sí, ha llevado escolta, como yo y como tantos otros. Pero no estábamos hablando de su papel sobre ETA. Él removió Roma con Santiago para conseguir que su partido girase y no le importase gobernar negociando con Bildu, porque, si no, no podía. Y no quería que los gobiernos estuvieran en manos de UPN porque luego no podía hacer lo que ha hecho. Lo que quería era tener acceso al poder directamente para amañar contratos y hacer sus negocios fraudulentos.
–A la luz de la instrucción, ¿el objetivo real de Cerdán al pactar con Bildu era enriquecerse con la corrupción?
–Totalmente. Es lamentable que Cerdán fuese capaz de vender Pamplona en un pacto, de darle la Alcaldía a Bildu, para poder hacer estos amaños corruptos. Esos acuerdos eran una línea roja clarísima, el Partido Socialista lo sabe; han supuesto un cambio radical de paradigma y también en la relación con nosotros. Y ahora sabemos, además, para qué lo hizo Cerdán, al que ayudó en esas negociaciones Antxon Alonso, con el que creó una empresa a través de la cual han hecho los contratos y las mordidas.
–Él se escudó en que es víctima de una suerte de persecución política y judicial precisamente por esos acuerdos, una tesis que encontró eco en Junts. ¿Salió malparado el Estado de derecho de la comparecencia?
–Mi sensación es que aunque ellos se construyen un relato, la gente no es tonta; el Estado de derecho no ha salido malparado. Sabemos del victimismo de los independentistas y por qué está Puigdemont en Waterloo. Yo entiendo que Cerdán tratara de justificarse, nadie dice de sí mismo 'soy una mala persona, soy un corrupto, soy un ladrón'. Se ha inventado una película para tratar de salvar su dignidad, pero el Estado de derecho funciona. Y las evidencias son claras; evidencias en las que no quiere entrar.
–¿Malgastó el PP un interrogatorio a Sánchez mal planteado?
–Las comparecencias funcionan por lo que dicen y por lo que callan. Y también vienen bien para conocer a los personajes. Cerdán se retrató ante la opinión pública y Sánchez también. Con su soberbia y con sus evasivas.
–¿Volvería a citarlo?
–Yo no lo llamaría ahora. No va a aportar nada nuevo.
–¿Condena esta causa al PSN a perder pie ante Bildu?
–Sí, porque ¿qué aporta ahora mismo votar al PSN? Nada. Es una marioneta en manos de lo que demandan sus socios. Y yo espero que la corrupción le cueste en términos electorales.
–¿Y qué está haciendo mal UPN para no resintonizar con una mayoría social más amplia?
–Bueno, posiblemente no estamos consiguiendo lo que debiéramos. Pero estamos sufriendo el que nos hayan apartado de todo, el ser el objeto de las críticas de todos. Sufrimos la desilusión de la ciudadanía como los demás, y también porque no tenemos el poder ni en el Gobierno de Navarra ni en el Ayuntamiento de Pamplona.
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